
De los topos, aprendimos a hacer túneles.
De los castores, aprendimos a hacer diques.
De los pájaros, aprendimos a hacer casas.
De las arañas, aprendimos a tejer.
Del tronco que rodaba cuesta abajo, aprendimos la rueda.
Del tronco que flotaba a la deriva, aprendimos la nave.
Del viento, aprendimos la vela.
¿Quién nos habrá enseñado las malas mañas? ¿De quién aprendimos a atormentar al prójimo y a humillar al mundo?
Las bocas del tiempo. Eduardo Galeano
Proyecto de filósofo ha facilitado el enlace para descargar esta joya.
La respuesta a tu pregunta puede ser, que somos los únicos que conocemos que estamos indefensos contra los elementos de la naturaleza.
ResponderEliminarDe los humanos que nos precedieron, claro.
ResponderEliminarPero ojo, también aprendimos de ellos la solidaridad. Éste no es un mundo sólo de sombras.
Un abrazo (tanto tiempo...).
:)
A veces creo que siempre lo supimos.
ResponderEliminarUn saludo.
.. seguro que de algún pajarraco, gordo y envidioso..
ResponderEliminarLo mismo esas cosas se aprenden solas , vienen ya en el pack de la vida ...sino no me lo explico, ¿de los otros ? y los otros quienes son ?.
ResponderEliminarUn beso
A mi Galeano se me olvida.
ResponderEliminarY no sabe que impresionante me parece el redescubrimiento¡¡
B x C
del ser humano, no te quepa ninguna duda.
ResponderEliminarbesos
De nosotros mismos, supongo, que a veces no somos más borricos porque es imposible serlo más...
ResponderEliminarGaleano me gusta mucho, ¡mucho!