miércoles, 14 de agosto de 2019

Una sonrisa sin reticencias

Caminaba junto a ella por senderos llenos de agua y de hojas secas, tendiéndole a veces la mano para evitar un charco. Entonces sonreía con una sonrisa sin reticencias.

El Gigoló. Francoise Sagan

2 comentarios:

  1. Caminando por los cielos de la naturaleza, entre la divinidad de los senderos y praderas, se hace precioso el camino cuando alguien te acompaña y te tiende la mano.

    Me ha encantado tu entrada.

    Besos y feliz día.

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  2. Muchísimas gracias, un abrazo.

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