domingo, 6 de septiembre de 2020

Dejándola morir


Eso decía esta mañana una radioyente que se estaba haciendo con la enseñanza pública: dejándola morir. Y es cierto, porque si lo más crudo de la pandemia sorprendió a docentes y discentes desprevenidos, desde marzo hasta ahora no se ha hecho nada para garantizar una enseñanza segura, nada. La diferencia entre este principio de curso y todos los anteriores no es la incertidumbre, sino la certeza de que el sistema educativo no aguantará. Sé de lo que hablo, he sido profesora de secundaria durante los últimos treinta y siete años. Ya era desastroso el mantenimiento de clases de infantil con veinticinco alumnos, o de bachillerato con treinta y nueve, o de formación profesional básica sin talleres adecuados para las prácticas propias de la especialidad... Y esto no ha cambiado, continúa así.

La prueba del abandono de la enseñanza está precisamente en que ahora, con covid y con el curso académico comenzado, las autoridades educativas hablan en futuro: "haremos, conseguiremos, implementaremos..." Como siempre, más de lo mismo. Es duro pero es real.

Peligra lo público, no sólo la enseñanza, también la cultura, el arte, etc., el patrimonio común se deja morir. La ciudadanía vive confundida  con tantísimas ocurrencias vanas y contradictorias de unos gobernantes mentirosos que ofrecen espuertas de propaganda y migajas de atención a una población empobrecida, asustada y explotada. Y engañada. Si al menos nos dijeran la verdad!

Saludos desde la selva.

                                                                              
Conectados. Marsha Krygier

Si tu plan es para un año, siembra arroz;
si es para diez años, planta árboles;
si es para cien años, educa niños.

Confucio
Ahí radica el verdadero problema: la clase política no piensa a cien años, y seguramente tampoco a diez.

4 comentarios:

Emilio Manuel dijo...

Dices que nada ha cambiado, hoy comienza el curso en muchas comunidades, y los medios de comunicación hablan y hablan, entre lo que dicen es que desde el 2008, comienzo de la crisis económica, la inversión en educación ha caído de forma muy alarmante, y que no se ha recuperado, no nos habíamos dado cuenta, pero un bichito diminuto ha hecho que todas nuestras costuras se vean rotas, lo peor de todo es que aquellos que tienen que arreglarlo y que para eso los hemos votados, solo se tiran los trastos a la cabeza mientras todo sigue de mal en peor. ¡¡Dios, que país!!.

Saludos

Índigo dijo...

Sí, desgraciadamente, por eso titulo "Dejándola morir", porque es la consecuencia de los recortes de año tras año, agravándose ahora la situación con la pandemia. Hoy mismo otra radioyente malagueña, maestra ella, ha denunciado que en su centro han recortado una unidad, obligando por tanto a reagrupar en clases más numerosas. Lo mismo ha ocurrido en mi antiguo insti, lo que me hace pensar que está ocurriendo en muchos centros, al menos en nuestra provincia. Recorte de grupos significa recorte de docentes y también, la mayoría de las veces, significa que los equipos directivos también se recorten en número de personas y en número de horas para dedicar a las labores directivas. Es terrible que el discurso que se hace público, el que llega a los medios, sea tan distinto de la realidad. En fin, no desfallezcamos.
Gracias por tu comentario, que siempre me acompaña, un abrazo y feliz semana.

AMALIA dijo...

Tienes mucha razón en lo que expones.
Y sin soluciones.
Así vamos... una pena.
Un abrazo.
Un placer visitarte.

Inma dijo...

Gracias por pasarte por aquí, un abrazo.