martes, 16 de octubre de 2007

La gran fábrica del mundo (VI)


China es cada vez más poderosa económicamente, militarmente y en expertos, pero no tiene justicia. Sólo será una superpotencia si introduce democracia, permite la libertad y respeta los derechos humanos.

Para convertirse en una genuina superpotencia, China necesita el respeto del resto del mundo, necesita autoridad moral. Una solución pacífica con el Tíbet se la daría.


Dalai Lama, 30-09-07


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buenos deseos los del Dalai, pero la Unión Soviética también se convirtió en una superpotencia siguiendo tan horrendo camino.

Ojalá que así no fuera; pero me temo que así es.

Saludos

Cerillo dijo...

Estoy con perio las superpotencias, sean democratas o totalitarias no desandan demasiados caminos