Natalia Goncharova
El deseo es demasiado fuerte, no puedo evitar fijarme en Mamadou y en Leila mientras ponen las mesas. Del primero me gustan sobre todo los brazos y las piernas, que me recuerdan las de su madre. De la segunda me fascina su trasero, el más hermoso de Marsella. Es como un tomate pulposo de piel tersa.
Franz-Olivier Giesbert
No hay comentarios:
Publicar un comentario