miércoles, 29 de julio de 2015

Tu mirada es el paisaje (CIV)

Bruce Holwerda

Temí que ella notase que mi modo de mirarla era otro; entonces, procuré dar a mi mirada una fijeza que pudiese parecer perplejidad o cansancio y que me permitiese al mismo tiempo seguir estudiando el nuevo campo abierto a mis conocimientos.

Memorias de Leticia Valle. Rosa Chacel

jueves, 23 de julio de 2015

Mediocridad, no, gracias

Instalarse  en la mediocridad es una elección personal; no es obligatorio hacerlo.

martes, 21 de julio de 2015

Cierre por desesperación

Hay calles que muestran, como esqueletos, una estructura ósea de lo que fueron algún día. Cierran negocios, se vacían inmuebles, se opacan sus cristaleras, pero rara vez se quitan los rótulos; sus nombres perduran acusadores en su queja, van más allá. Pasan meses, años incluso, y seguimos leyendo Charcutería Vicky, Librería Cuentacuentos, Ferretería Garín, Churrería Díaz, etc. Como es nuestro barrio, sabemos quiénes dejaron piel y sudor, ilusión y futuro en esos proyectos de vida hoy desechados. Eran miniempresas tan pequeñitas que les venía grande la legislación talla única. No pudieron soportar el peso de tantas exigencias administrativas, laborales y fiscales. La burocracia y la uniformidad las aplastaron.
Orlando Buccino Sacco

Ella venía aquí con el crepúsculo
para aprender a dibujar.
Mientras hoy oscurece en el pequeño
solar lleno de escombros,
el viento va arrastrando
entre cascotes un dibujo suyo.
Dentro de mí se encienden las ventanas
de aquel viejo taller y, frente a un caballete,
una chica aplicada, silenciosa, dibuja.
Afuera yo la espero con los ojos cerrados
sabiendo que, al abrirlos, podré ver
sólo la excavadora alzando inmóvil
su pala con los dientes de hierro en el vacío.

Derribo del Carrau Blau. Joan Margarit
María Hergueta

viernes, 17 de julio de 2015

Su majestad el árbol

Se necesita un poeta para describir un árbol.


domingo, 12 de julio de 2015

Tu mirada es el paisaje (CIII)

Adolf von Menzel

La luna deambula en mis ojos
y el murmullo de su voz
pinta en mi corazón un poema.
Y así vuelo como una rosa
entre los versos azules
de sus pestañas.
Con mis pétalos voy señalando
cada rastro de su mirada
que me arroja en el viento
bajo forma de esmeralda.
Quien pudiera detenerte,
amanecer entre tus labios
enredarse... en lo más privado,
... en tu cuerpo
y ofrecerte el amor que
por ti siento.

Miradas prohibidas (Tormenta de especias). Lamiae el Amrani, 2010       

sábado, 11 de julio de 2015

Vamos a retozar

Miles Hyman

Habían conectado totalmente en la frecuencia de la nostalgia y de la melancolía, los dos necesitaban volver al pasado. Carlos siente la belleza como algo agresivo. Pero tiene que aparentar sosiego. Le gustaría decirle inmediatamente, no puedo esperar ni un minuto más sin abrazarte, ya eres muy mayor para tomar helados y chocolate, los dos somos uno, pequeña puta, y nos comunicamos como perros vagabundos por los olores secretos, vamos a jugar juntos hasta la muerte, vamos a retozar, a olernos todos los rincones, a lamernos,  a respirarnos, a mordernos.

La novia. Raúl del Pozo. 1995

domingo, 5 de julio de 2015

Flor de guayaba

Llegué al amanecer. Medio dormías. Te llevé un trozo de nuestro mundo: -la guayaba ha florecido, te susurré al oído.
La flor no huele, pero el olor de la fruta es pura sensualidad.

sábado, 4 de julio de 2015

Tu mirada es el paisaje (CII)

Sitting Girl. Cuno Amiet

Su mirada se había vuelto ausente y huidiza, pues vivía en un perpetuo estado de semiembriaguez. Así y todo, no adelgazaba. Su rostro, por el contrario, tenía tendencia a engordar, pero había cobrado un color macilento.

La sed. Georges Simenon, 1934