martes, 30 de abril de 2019

Máquinas y paradojas

La técnica es insaciable porque siempre exige mayor desarrollo y mayor cantidad de máquinas, enreda a sus siervos en una vorágine que los atrapa para siempre. Es falso que las máquinas proporcionen "tiempo de ocio", sólo otorgan descansos momentáneos cronometrados por el reloj -otra máquina-, y la angustia de que se terminen.


Las máquinas no saben de felicidad. Luis Fernando Moreno Claros
(A propósito del ensayo La perfección de la técnica, de Jünger)



¿No es la paradoja de nuestra cultura que al convertirse en dueña del espacio se haya hecho esclava del tiempo?

El primer siglo después de Béatrice. Amin Maalouf


La capacidad para cambiar el entorno tiene dos alternativas: la tecnología (cambiar el entorno) y la movilidad (cambiar de entorno).

En más de tres siglos de ciencia todo ha cambiado excepto tal vez una cosa: el amor por lo simple.


Jorge Wagensberg


domingo, 28 de abril de 2019

Tu mirada es el paisaje (CXX)

Simon Glücklich

Estoy esperando al chico, no le veo desde las últimas navidades. Entre nosotros, simplemente el vernos -supongo que él también no sólo será consciente de que me ve, sino de que en alguna ocasión querrá mirarme, aunque sólo sea para cerciorarse de que sigo donde me dejó- representa el nivel más alto de la comunicacion humana.



La higuera. Ramiro Pinillas

miércoles, 24 de abril de 2019

Al agua!

Al agua. Joaquín Sorolla

El muchacho dio un paso y me alargó la diestra, con una sonrisa tan clara que salté a la playa sin pensarlo más.


Bomarzo. Manuel Mujica Laínez

sábado, 20 de abril de 2019

El arte de escuchar

NO SALE SIEMPRE, pero se intenta:
  1. Observo al interlocutor.

  2. No le interrumpo.

  3. No juzgo o valoro lo que dice mientras escucho.

  4. No ofrezco ayuda o soluciones prematuras.

  5. No rechazo lo que la otra persona siente.

  6. No cuento mi historia mientras el otro habla.

  7. Evito el síndrome del experto.

  8. Hablo poco: se trata de escuchar.

  9. Respeto las pausas.

  10. Escucho hasta que el otro haya terminado.

martes, 16 de abril de 2019

Sátiras

Hay dos clases de sátira, una para reír, que es la que apunta a las ideas, y otra para llorar, que es la que apunta a las personas.

La libertad en aforismos. Jorge Wagensberg

domingo, 14 de abril de 2019

Tu mirada es el paisaje ( CXX)

Dominik Jasinski

Ella entró en nuestra casa cuando él estaba detenido. La dejé entrar. Yo mismo le abrí la puerta; por aquél entonces siempre abría yo la puerta porque al no estar él allí, el colegial se había convertido en el hombre de la casa para mi madre y mi hermana. Entonces, yo componía mi expresión pensando enfrentarme a la policía que venía a registrar la casa de nuevo. Pero se trataba de una mujer rubia, con la mirada franca y la presuntuosa sonrisa de disculpa propias de la gente que viene a ayudar.


La historia de mi hijo. Nadine Gordimer

viernes, 12 de abril de 2019

De puntillas

Degás

Paseo por la vida con sigilo, nada más, siempre ha sido así. Paso por los días de puntillas para que nada se altere. Para no resbalar, para no caer, intentando siempre pasar desapercibida.


El viaje de Tanaka. David Cantero

lunes, 8 de abril de 2019

Amor mío

Él me llamó amor mío.
Me había llamado amor mío y eso era lo único que yo quería saber, eso y que sus muslos temblaron una noche contra la palma de mis manos y después me miró muy fijamente, sin decir nada, como si pretendiera destruirme, aniquilarme, borrarme para siempre de su memoria o grabar cada detalle de mi rostro en el relieve de sus propios ojos, yo lo sabía y eso era lo único que me importaba, porque sólo vivía para recuperar aquel temblor, para regresar una y otra vez a esa pequeña habitación de hotel, una cama grande, un armario empotrado, dos butacas tapizadas en la consabida cretona estampada...

Atlas de geografía humana. Almudena Grandes


jueves, 4 de abril de 2019

Dolor de corazón

Y te aseguro que no cabe entre los hombres dolor igual al que sienten los que piensan bien sin poder hacer nada por impedir el mal.


La historia de Heródoto. Viajes con Heródoto
Ryszard Kapuscinski
Ésta es el hambre.  Un animal
todo colmillo y ojo.
No se harta en una mesa.
Nadie lo engaña ni distrae.
No se contenta 
con un almuerzo o una cena.
Anuncia siempre sangre.
Ruge como león, aprieta como boa,
piensa como persona.

El ejemplar que aquí se ofrece
fue cazado en la India (suburbios de Bombay), 
pero existe en estado más o  menos salvaje
en otras muchas partes.

No acercarse.

El hambre (El gran zoo). Nicolás Guillén
Leo. Damon Hellandbrand

martes, 2 de abril de 2019

Enredos cotidianos

La mayoría de nuestras equivocaciones en la vida nacen de que cuando debemos pensar, sentimos, y cuando debemos sentir, pensamos.


J. Churton Collins