viernes, 20 de septiembre de 2024

LA LITERATURA COMO ANSIOLÍTICO

La escritura es un gran ansiolítico, pues, mientras estás frente a la línea incipiente, nada malo puede sucederte. Como mucho, abusar de los adjetivos y pecar de lugares comunes. Quizá por eso hoy mucha gente escribe, aunque sea regular, porque el lápiz de la imaginación les ronda.

La literatura como ansiolítico
Joana Bonet

Hoy aprendí la palabra ESCOBÉN en uno de los cuentos del libro Érase una vez, de Margaret Atwood:

Los cargueros eran enormes armatostes. Tenían los escobenes de las anclas oxidados...

Ahora recuerdo los dibujos infantiles de barcos con hileras de agujeritos en sus cascos, esos son los escobenes:

Cada uno de los agujeros a uno y otro lado de la roda de un buque, por donde pasan los cables o cadenas de amarra. DRAE.


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